La DGT considera que el repunte de la siniestralidad en 2016 obliga a revisar un sistema que cuenta ya con diez años.

El nuevo director general de la DGT, Gregorio Serrano, ha dejado claro que después de diez años de vigencia del carné por puntos, es momento de «sentarse» y ver «qué ha sido positivo» y qué se puede cambiar. «No podemos quedarnos ahí, hay que evaluarlo y en ese pacto por la seguridad vial se tiene que poner sobre la mesa qué medidas hacen falta para que el carné por puntos siga siendo un sistema útil para la reducción de la siniestralidad«, avanza Serrano tras reconocer que los datos de siniestralidad «no son buenos» y que la accidentalidad del año recientemenete finalizado «ha empeorado«.

Por eso, el nuevo responsable de Tráfico considera que 2017 será «un año clave» para afrontar el reto de que todos los sectores se pongan de acuerdo para diseñar un «buen plan» de seguridad vial.

La DGT es «consciente» de que ha llegado el momento de «evaluar el futuro» de esta medida, y de hacerlo con «opiniones y datos objetivos«, además de fijándose en las reformas que han hecho otros países europeos. Un «camino por delante» y «mucho trabajo por hacer», insiste Serrano, que pide la colaboración de todos los sectores implicados para que «juntos» se pueda mejorar la seguridad vial tras concluir el año con más muertes en carretera desde hace más de una década.